La Comisión Disciplinaria de la FIFA abrió un procedimiento disciplinario contra el jugador ADOLFO MACHADO posterior a que el árbitro del partido de la competición preliminar de la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010 celebrado el 22 de junio de 2008 entre El Salvador y Panamá, le mostró la tarjeta roja en el minuto 89 debido a conducta violenta.
Según fue reportado en los informes del árbitro y del comisario del partido, el jugador MACHADO golpeó a un adversario en el pecho cuando el balón no estaba en juego.
En defensa del jugador, la FEPAFUT argumentó que el jugador salvadoreño, Rudi Corrales, se dejó caer simulando un golpe que nunca existió con la evidente intención de matar el tiempo, ya que el partido estaba a punto de finalizar, y utilizó esta táctica reprochable con la intención de engañar al árbitro.
No obstante, la Comisión Disciplinaria de la FIFA ha considerado que solo las decisiones del árbitro por una equivocación obvia de la realidad fáctica pueden llevar a una rectificación por parte de la autoridad decisoria.
Al hacer sus consideraciones “la Comisión Disciplinaria procedió a un análisis minucioso de las imágenes de video del incidente en cuestión y deliberó extensamente sobre la naturaleza y la gravedad de la falta. No obstante, de la cinta de video se desprende claramente que el árbitro tomó con clara intención la decisión disciplinaria correspondiente.”
Los miembros de la Comisión señalaron que la gravedad de la falta cometida no era inequivoca y consideró este hecho como una circunstancia atenuante y decide sancionar a Adolfo Machado con la mínima suspensión aplicable, es decir, un partido y que este jugador debe pagar una multa de 2,000 francos suizos.
La sanción de suspensión deberá cumplirse en el siguiente partido oficial de la selección nacional, lo que tendría lugar en la COPA DE NACIONES de UNCAF clasificatorio a la COPA ORO de la CONCACAF.
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